Por Rafael Aguirre Angulo
Un problema grave está sucediendo en Cozumel. Por más de que soy testigo que de noche hay una unidad de la policía patrullando la zona donde radico, fui notificado afuera de mi casa en horas de la madrugada por un elemento policiaco de que un individuo había intentado entrar a mi domicilio, pero que éste logro brincar por mi techo y escaparse por un terreno detrás de la privada donde radican mis vecinos quienes por lo que a mí respecta jamás hemos experimentado algo de esta manera. Esto a pesar de que hemos escuchado reportes de robos e intentos de robo en nuestra colonia que se localiza apenas a pocas cuadras de la estación de policía de Cozumel. Pero el problema no es solo ese. En redes sociales amigos y otros ciudadanos anuncian semanalmente saqueos de domicilio, asaltos o robos de motocicletas en diferentes zonas de nuestra pacifica comunidad. Pero sin duda alguna el acto reciente más absurdo y completamente inaceptable fue el ocurrido la madrugada del domingo 16 de febrero en la zona centro de Cozumel, a unos metros del parque y el malecón donde el turismo y nuestra comunidad fueron testigos de una víctima de estrangulación, acto que demuestra la acción de un homicida experimentado y que sin cuartel tomo la vida de un individuo de manera brutal por apoderarse de una determinada cantidad de dinero. ¿A que hemos llegado? Ante estos casos, el gobierno del estado reaccionó el 25 de febrero con la entrega de patrullas y armamento entregadas por mismo el gobernador Roberto Borge Angulo, mismo que reconoce que en nuestro municipio el fuero común realiza el 95% de los crímenes en Cozumel dejando la actividad del crimen organizado fuera de nuestra comunidad. Pero esto solo quiere decir una cosa. El crimen de fuero común en la mayoría de los casos es provocado por la falta de actividad económica, si esta es la causa del aumento del crimen en Cozumel, las autoridades deben de tomar medidas económicas y optar por opciones que nos brinden mayor seguridad, así mismo la entrega de patrullas y armamento, que sumaron un aproximado de 5 millones de pesos, son una medida necesaria para aumentar el patrullaje, pero no para atender el problema de raíz. La realidad está en las calles y la necesidad conlleva al individuo a realizar actos ilícitos. Hay alternativas, siempre y cuando se tomen otro tipo de medidas para atacar al crimen además de la actividad policial, Una batalla realizada por varios frentes siempre es más efectiva. Espero estas se tomen en cuenta y se nos regrese la paz y la prosperidad que por muchos años hemos extrañado en nuestra comunidad.
Por otro lado la armonía de nuestra comunidad de nueva cuenta se vio sin saldos que lamentar durante nuestras fiestas del carnaval. Un reconocimiento a la comunidad y a las autoridades que trabajaron y festejaron dentro de los límites de los eventos, para que nuestro carnaval se disfrute y se lleve a cabo de manera solidaria. También hago mención de las actividades de la presidenta del DIF la Sra. Gina Ruiz de Marrufo que integró con éxito la nueva categoría de de reyes y reinas especiales del carnaval, mismos que sorprendieron al público con sus danzas y alegrías. En una acción sin precedentes y derrumbando así una barrera mas para nuestros conciudadanos con capacidades diferentes. Esto entre otros aspectos en los que destaca la constante actividad del DIF de Cozumel bajo su administración. Cabe mencionar que el carnaval más que un medio de distracción y una actividad económica muy importante, es un método de solidaridad en nuestra comunidad, ya que es el pueblo el que en realidad participa, ya sea en comparsas o con su presencia durante los eventos. Pero recordemos que nuestra responsabilidad social como ciudadanos y contribuyentes continúa y va más allá de esta celebración anual. Hay un arduo trabajo por realizar en nuestra isla y todo un año de retos en el que todos nos vemos envueltos a contribuir, de nueva cuenta con la participación y el trabajo del cual nos caracteriza a nosotros los cozumeleños.
Por otro lado la armonía de nuestra comunidad de nueva cuenta se vio sin saldos que lamentar durante nuestras fiestas del carnaval. Un reconocimiento a la comunidad y a las autoridades que trabajaron y festejaron dentro de los límites de los eventos, para que nuestro carnaval se disfrute y se lleve a cabo de manera solidaria. También hago mención de las actividades de la presidenta del DIF la Sra. Gina Ruiz de Marrufo que integró con éxito la nueva categoría de de reyes y reinas especiales del carnaval, mismos que sorprendieron al público con sus danzas y alegrías. En una acción sin precedentes y derrumbando así una barrera mas para nuestros conciudadanos con capacidades diferentes. Esto entre otros aspectos en los que destaca la constante actividad del DIF de Cozumel bajo su administración. Cabe mencionar que el carnaval más que un medio de distracción y una actividad económica muy importante, es un método de solidaridad en nuestra comunidad, ya que es el pueblo el que en realidad participa, ya sea en comparsas o con su presencia durante los eventos. Pero recordemos que nuestra responsabilidad social como ciudadanos y contribuyentes continúa y va más allá de esta celebración anual. Hay un arduo trabajo por realizar en nuestra isla y todo un año de retos en el que todos nos vemos envueltos a contribuir, de nueva cuenta con la participación y el trabajo del cual nos caracteriza a nosotros los cozumeleños.
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